La luna se hacía más grande cada noche que la mirábamos juntos, y cuando se achicaba era como una señal de que debíamos dejar de vernos por unos cuantos días, cuando volviera a crecer y a hacerse más gordita, cuando volviéramos a vernos y a reencontrarnos con cada destello de nuestras pupilas.
viernes
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Diseño por headsetoptions | A Blogger por Blog and Web
0 comentarios:
Publicar un comentario